El fin del mundo de acerca: comienza la cuenta atrás...
Alucinante, estupendísimo, me lo he pasado bomba leyendo este libro. Es de los que enganchan sin remedio desde la primera página hasta la última. Empieza cañero, tanto que a las pocas páginas ya se ha cargado la pirámide más grande de Egipto. Después se tranquiliza un poco, y a medida que te vas adentrando en la historia (o en las historias) la cosa se va poniendo cada vez más interesante, emocionante y fantasiosa. Sobretodo fantasiosa, el autor se suelta bastante en este aspecto, y en ocasiones se deja ir del todo, vamos, quiero decir que es una ida de pelota de dimensiones apocalípticas.
No desaprovecha las ocasiones de inyectar mensajes ecologistas, ni de mostrarnos la belleza del ser humano, comparándolo con la crueldad infinita que muestran en cada línea unos personajillos de los que no te cuento nada para que la sorpresa sea completa.
Hay escenas de gran belleza visual y emocional, de luces fantásticas y maravillosos colores, de hecho, con frecuencia, compara las imágenes con emociones y describe los sentimientos por su color, la intensidad de su luz, sus movimientos, su forma, su tamaño...
Pero también hay escenas horribles no aptas para plasmar en una película que sería clasificada X sin duda alguna, y no por la violencia en sí, si no por la impunidad para describir detalles.
Pero todo esto ayuda, el ir pasando de la belleza más profunda al horror más inimaginable ambientados con el lenguaje pomposo y a veces exagerado del autor nos encontramos con una novela inevitablemente épica, tanto por el contenido como por la forma.
En definitiva, esto es ciencia-ficción fantástica con mucha acción. Si tienes ganas de leer algo entretenido sin complicarte mucho la vida “2012” es la novela ideal, segurísimo que no te defraudará.
Y te la fundirás en pocos días.