Este año no estoy disfrutando mucho con la NASCAR, las carreras de Denny Hamlin se cuentan por desastres, una detrás de otra. Cuando va bien siempre pasa algo y acaba el veintipico, y cuando va mal no pasa nada. Pero bueno, nos queda el final de la carrera de Talladega.
¿No es alucinante?
Nuestra preparación de esta temporada está haciendo que me pierda casi todo; el otro día en un hotel vimos una carrera de la Indy y la verdad es que nos cansó un poco con tanta bandera amarilla que neutraliza la carrera: una pena de mala estrategia de Danika Patrick.
ResponderEliminarMe gusta el formato Náscar, pero reconozco que no tengo tiempo para mantener tantos puntos de interés diferente.
Un saludo,
Yo este año, por suerte o por desgracia, tengo bastante tiempo, pero no tanto como para desperdiciarlo. Por eso creo que me saltaré alguna. Si tienes un favorito y va mal la carrera pierde muchísimo aliciente.
ResponderEliminarUn saludazo.